¿Te interesa reformar tu vivienda ahora o mejor esperar al verano?
Si estás pensando en reformar tu casa, ya se trate de un pequeño lavado de cara como pintar las paredes o de obras de mayor envergadura como reformar la cocina o tirar tabiques para redistribuir el espacio, una de las cuestiones más importantes a tener en cuenta es la elección del mejor momento para empezar con las obras.
Si nos basamos en la oferta y la demanda podría pensarse que el verano es el momento a evitar para la renovación de viviendas ya que la demanda de reformas en esa época suele ser bastante alta y, sin embargo, algunos proveedores dejan de prestar sus servicios durante el periodo estival. De todas formas, en el mercado actual de la construcción, la demanda de constructores y empresas de reformas es alta todo el año, aún más en la etapa post pandemia en la que tras el confinamiento se ha notado un notable incremento de la preocupación social por sacar el mayor partido posible a las viviendas.
Razones por las que es bueno realizar una reforma en verano
Por otro lado, existen algunas razones que apuntan al verano como la mejor estación del año para acometer reformas. A continuación, exponemos algunas de esas razones que deberías valorar a la hora de decidirte:
1.- El clima en verano es más favorable para las reformas. El buen tiempo de la temporada estival es de largo la mayor ventaja de hacer las reformas de tu vivienda en verano. En verano es menos probable que llueva y por lo tanto, menos probable que se produzcan retraso en las obras como consecuencia de las inclemencias del tiempo.
Además, si dispones de un espacio exterior como un patio, terraza o jardín, el verano es el momento ideal para aprovechar ese espacio como comedor alternativo o incluso como cocina si estás reformando esas estancias de tu casa y tienes una barbacoa. Si lo que estás reformando es el baño, también podrás temporalmente utilizar la ducha de la piscina para asearte mientras tu baño está fuera de servicio.
El calor también ayuda a que los materiales se asienten mejor, se seque más rápido el cemento con el que se fija el pavimento o la pintura de las paredes, por ejemplo. Esto permitirá que ahorremos tiempo y cuando hablamos de obras, ahorrar tiempo es ahorrar dinero. Ventilar, limpiar y eliminar los olores de la reforma también será más fácil durante el verano. ¡A buen tiempo, buenas obras!
2.- Los días son más largos y los obreros dispondrán de luz natural durante más horas para avanzar mejor con los trabajos de tu vivienda.
3.- Es época de vacaciones. Si la reforma planeada para tu vivienda implica carecer de cubierta, baño, cocina o alguna pared durante unos días, lo mejor será encontrar un lugar alternativo para habitar durante los días que dure la reforma. Por suerte, el verano es la estación elegida por excelencia para disfrutar de las vacaciones y planificar algún viaje. Los niños no tienen colegio y algunos trabajos nos obligan a disfrutar de las vacaciones. Aprovecha el momento para alejarte del caos de la reforma. En cualquier caso, antes de irte es importante que dejes todo preparado, planeado y organizado. Asegúrate de mantenerte en contacto con el responsable de la obra de tu vivienda, para que el resultado de la reforma sea el deseado y no se produzcan interrupciones innecesarias es imprescindible que los propietarios se impliquen y sigan las obras de cerca.
Con suerte, la reforma de tu casa coincidirá también con las vacaciones de tus vecinos. Ellos no se verán perjudicados por los ruidos y la suciedad que implican una reforma y tu no tendrás que oír sus quejas.
Aunque no tengas planeado viajar o no dispongas de una segunda residencia a la que retirarte durante la ejecución de las obras, en verano pasamos más tiempo fuera de casa, en la playa, la montaña, las terrazas y organizamos menos eventos en el interior de la vivienda, con lo que el hecho de que esté llena de materiales de construcción y obreros nos resultará menos molesto que durante otras estaciones mas frías o lluviosas en las que nos apetece menos salir de casa.
4.- El verano es uno de los periodos más relajados del año y en el que disponemos de más tiempo. Estemos o no de vacaciones, en verano baja el ritmo de trabajo casi en todos los sectores económicos, incluso se reduce la jornada laboral. Podemos aprovechar este descenso en el ritmo diario para meditar y tomar las decisiones sobre los detalles de la reforma, así como para estar pendientes de la ejecución de las obras.
El aire del verano y el descenso del ritmo diario resultan inspiradores. Aprovecha esa inspiración natural que fluye durante la energía especial de esta estación del año para darle un look refrescante a tu vivienda. Tómate el tiempo necesario para investigar las tendencias y descubrir como encajan con tu estilo personal y las necesidades de tu hogar.
5.- Tendrás tu casa preparada para los eventos de invierno. Si aprovechas el verano para dar ese nuevo aire deseado a tu vivienda, pulir algunos defectos o hacerle un lavado de cara, podrás disfrutar de las ventajas de la actualización que ya estarán listas cuando lleguen las fiestas navideñas y tengas visitas o grandes cenas o eventos organizados en casa. Seguro que a la hora de organizar tu reforma hay algunos puntos que te has planteado para que tu casa luzca mejor y más cómoda para tus invitados en estas reuniones.
Una reforma requiere tiempo de planificación. Si estás pensando en reformar tu vivienda durante el verano, ahora es un buen momento para empezar el contacto con Reformas José Banda. Haciéndolo con la antelación suficiente te aseguras disponibilidad y más margen para ir empezando el contacto y la relación de confianza necesaria antes de ejecutar la obras que estás deseando. Para un resultado satisfactorio es imprescindible que nos conozcamos y analicemos juntos el proyecto.
